Esta es una película que engancha desde el principio y que nos da la posibilidad de conocer un poco más sobre el conflicto Palestino-Israelí y es que 70 años son demasiados para un conflicto que ya se ha cobrado demasiadas vidas. Cuando se prepara para entrar en el ejercito israelí, Joseph descubre que no es hijo biológico de sus padres. Al nacer, en medio de la guerra, fue intercambiado accidentalmente por otro bebé de una familia palestina que vive en los territorios ocupados de Cisjordania. Todo cambia para estas dos familias. El rechazo, la duda, la pérdida de identidad, los prejuicios de raza y religión crean una dolorosa barrera en sus vidas, en una atmósfera dominada por el miedo y el odio.